EL PROYECTO

EL FACIALISMO

Atemporal Atelier es un paso más en la evolución del proyecto de emprendimiento empezado en 2013; un proyecto, propio y personal, de facialismo.

El facialismo es todavía una profesión bastante desconocida en occidente, no así en los países orientales, donde es una profesión muy valorada y de gran prestigio. Sus raíces están en la Medicina Tradicional China (MDT), por tanto, su finalidad es terapéutica; se trata de conseguir la salud de la piel desde una visión holística, es decir, equilibrando cuerpo y mente.

Escuchar y diagnosticar con precisión el estado del cutis del paciente y la aplicación de métodos manuales no invasivos, es la base para conseguir la salud de la piel mejorando la homeostasis del manto hidrolipídico, el crecimiento de las colonias del microbioma, la neocolagénesis a nivel dérmico, la relajación de la musculatura y la eliminación de contracturas, etc.

Las técnicas utilizadas son el Kobido, la Fustaterapia, la Acupuntura, el Sculptural Face Lifting, el Skin Blade, las Tazas Chinas (ventosas), la Gua Sha... Todas ellas, además, con un componente holístico relajante y equilibrante importantísimo.

También es de especial importancia los productos utilizados en las terapias, que deben ser 100% naturales, siendo especialmente interesantes los hidrolatos con probióticos y las pomadas calmantes.

Por último, si tuviera que asimilar el facialismo a alguna profesión conocida en occidente, no sería con la estética, sino con la naturopatía, con una “medicina alternativa”, en este caso centrada en el rostro, que busca la sanación mediante métodos naturales.

Sin embargo, siendo la tradición la base del facialismo, existen técnicas innovadoras y de vanguardia, siempre no invasivas, que considero muy interesantes, y que también incorporo a mis tratamientos para complementar sinérgicamente la experiencia facialista.

QUIÉN SOY
MAICA LÓPEZ
«ir siempre un poco más allá, es mi motor de vida»
Me llamo Maica López, tengo cincuenta años (y pico…), y evolucionar, ir siempre un poco más allá, es mi motor de vida.

 

Profesionalmente he pasado por diferentes etapas; al terminar BUP y COU estudié Ingeniería Técnica de Obras Públicas, y desarrollé esta profesión durante veinte años.

 

Pero algo latía dentro de mí. Cabe decir que durante los primeros años de estudios universitarios, también estudié Estética y Belleza, de modo que compaginé la universidad con el trabajo de esteticista al que entonces era el negocio familiar.

 

Pues bien, sin lugar a dudas la estética arraigó dentro de mí y, en 2013, bajo el paraguas de una franquicia barcelonesa especializada en el sector, abrí mi primer Centro de Estética Integral; un proyecto de emprendimiento donde se ofrecían todo tipo de servicios de estética (faciales, corporales, masajes, estética decorativa…) e incluso Beauty Parties.

 

Pero hacia el año 2018, mi forma de hacer, el arraigo en el territorio, y la necesidad de crecer, me llevó a salir de la franquicia para desarrollar un proyecto propio, más técnico y profesionalizado, y donde yo ya me dedicaría exclusivamente a realizar tratamientos faciales, mientras que el resto de colaboradoras realizaban otros tipos de tratamientos, nacía así el Atemporal Esthetic Lab.

 

Se abrió entonces ante mí todo un nuevo mundo, especializarme en los tratamientos faciales cambió mi forma de ver la estética que, dejaba de estar asociada simplemente a la belleza, para convertirse en algo más grande y profundo . El proceso de transformación había comenzado.

 

En 2023, después de un gran esfuerzo de formación con grandes maestros facialistas, y de un proceso de evolución personal y profesional, daba el paso definitivo hacia mi proyecto más personal, el estudio de facialismo Atemporal Atelier.

 

¡Un cambio importante de mentalidad, de actitud profesional, de manera de entender la relación con vosotros y con su piel, e incluso cambio de espacio! Necesitaba de un sitio mucho más íntimo y personal donde poder transmitir toda la fuerza de la filosofía facialista tal y como yo la entiendo.

 

Primero ingeniera, después esteticista y ahora facialista, ésta ha sido hasta ahora mi evolución pero, estoy segura, éste no es el final, sino un nuevo paso en el camino.